10
de mayo del 2020, Fiesta de San Juan de Ávila
Muy queridos feligreses:
Con
alegría y esperanza nos dirigimos a vosotros para desearos que os encontréis
bien y para recordaros que no hemos dejado de pedir al Señor todos los días,
desde el Altar, por vosotros y por vuestras familias. Tenemos noticias de que
algunos feligreses han perdido a seres queridos en este tiempo, otros han
enfermado, otros sufren las consecuencias económicas de esta situación tan
terrible. Pedíamos y seguimos pidiendo por todos. A pesar de las cruces somos
hombres y mujeres de Esperanza, esa misma Esperanza que nos dice que no estamos
solos, que Nuestro Salvador va a nuestro lado y que, con Él cerca, todo tiene
solución.
Como
sabemos, a partir de mañana día 11, podremos abrir las puertas de nuestra
Parroquia para que podamos orar ante el Señor en el Sagrario, para que podamos
reconciliarnos con Él por el Sacramento de la Penitencia, para que podamos
tomar su Cuerpo en la Eucaristía… para seguir caminando, como Pueblo de Dios,
por los caminos que nos llevan al Cielo. Bien sabemos del sufrimiento que os ha
supuesto veros ausentes de estos auxilios. Ha pasado el desierto y llegamos, de
nuevo, a esos tabores del Sagrario, los Sacramentos, la comunidad parroquial…
Tenéis
noticia de los nuevos horarios y de las disposiciones que hemos dado, siguiendo
las directrices de las autoridades competentes, para poder llevar a cabo las
celebraciones litúrgicas. Sabemos que todo es nuevo y que la incertidumbre de
esta situación pesa en ocasiones. Como decíamos antes, nada que temer, el Señor
está con nosotros. Sí os pedimos colaboración, especialmente respetando los
aforos que se han establecido y guardando las demás medidas; es cuestión de
organizarnos, ser prudentes y de tener paciencia. Debemos, de nuevo, dar
ejemplo con nuestra conducta.
La
actividad de la Parroquia se irá desarrollando poco a poco con normalidad. No
dudéis en solicitar lo que necesitéis o cualquier cuestión, duda o sugerencia.
No
olvidemos a aquellos feligreses que han sufrido y siguen sufriendo las
consecuencias económicas de la pandemia. La Cáritas Parroquial no ha parado de
trabajar por ellos y así lo seguirá haciendo con la ayuda de todos.
Seguimos
caminando al Cielo hermanos, como comunidad Parroquial, construyendo el Reino
de Dios, en esta porción de Mairena. Gracias, por tanto. Dios os lo pague.
Parroquia del Espíritu Santo
Mairena del Aljarafe